El coche lo compré en la provincia de Cuenca en enero de 2016. Estaba matriculado en el 82. Según el vendedor, llevaba muchos años parado, y lo corroboraba la pegatina de la última itv favorable de 1993. También me dijo que los kilómetros que marcaba eran los que tenía el coche, aunque no los aparentase. El estado general en el que estaba era pésimo, pero la razón por la que lo compré era el motor(daba gusto escucharlo), lo demás estaba casi todo hecho polvo. Os cuento un poco los problemas que tenía:
- La caja de cambios estaba averiada, la segunda velocidad no entraba.
- El coche no frenaba nada, el pedal estaba durísimo, supongo que de estar tanto tiempo parado.
- El embrague no iba bien, es decir, una vez metida la velocidad, costaba el sacarla, debido a que no desembragaba
- Las ballestas estaban completamente sin flecha, de ahí a que el coche estuviese volcado de la manera en la que estaba.
- A parte, tenía muchos golpes en la chapa.
El coche me lo trajeron hasta Vitoria (País Vasco) en grúa, y nada más llegar, ya empecé a desmontarlo. Esta tarea no hubiese sido posible gracias a la ayuda de mi padre y de un gran amigo ( Gonzalo) el cual compartimos la misma afición por los trastos viejos. Empezamos por las puertas, concretamente por la trasera para que no me molestasen a la hora de sacar todo del interior. Estas se desmontaron bastante bien, los tornillos no parecían estar muy oxidados. Después nos metimos con los tambores, uno de los tambores se resistió un poco por lo que os recomiendo una maza de goma y darles fuerte, sí, muy fuerte, en los cacharros así de viejos vale más la fuerza que la maña jejeje. Preparamos un cubo con gasoil para limpiar todo.
Antes de comprarlo, atención a lo inclinado que estaba, ballestas completamente sin flecha
De camino a la grúa
Ya en la grúa
El tanque en territorio vasco...
Esa misma noche empecé soltando los bujes y cambiando retenes
El cubo con gasoil que comentaba
Aleta fuera...
Después nos metimos directamente con la carrocería, no fue difícil el sacarla, el problema estuvo en todo el óxido que tenían los tornillos, solo para soltar la carrocería, utilizamos 3 botes de afloja todo y un par de cepillos de alambres, aun así tuvimos que utilizar la rotaflex unas cuantas veces.
Antes de limpiarlo...
Después...
Mi padre se encargó del lijado el chasis, en la foto, ya sin caja de cambios.
Un amigo echándome una mano en las tareas de lijado y sobre todo en la limpieza del motor...
Agradecer a Mikel por la excelente tarea que realizó en el motor, después de una tarde entera limpiánodolo exhaustivamente, parece recién salido de la fábrica de Linares jejeje.
Descubrí un problema bastante grave al desmontar el frontal del coche, la punta delantera izquierda, justo la que tiene el número de chasis estaba en mal estado, con lo que le soldé una chapa de 2,5 mm de grosor, cubriendo las cuatro caras, este es el resultado...
Después de lijar todo el chasis, preparamos una cabina de pintura improvisada con unos andamios y algunos toldos, la verdad que dio buen resultado. En cuanto a la pintura de chasis, primeramente dimos al poco óxido que no pudimos quitar, un convertidor de óxido. Para el resto se utilizó una imprimación bicomponente, concretamente Titan Yate. Después le dimos un antigravillado a todo, este fue el resultado:
También aproveché a pintar los ejes con una pintura bicomponente en negro satinado, la verdad que para ser la primera vez que pintaba a pistola, estoy bastante contento con el resultado.
Debo decir que todo esto está siendo posible gracias al foro de Land Rover al que formo parte!! Como dije anteriormente, la caja de cambios del Landy tenía un problema y no entraba la segunda velocidad. Estuve mirando precios y no me compensaba arreglarla, por lo que me lancé a la búsqueda de una de segunda mano y encontré una con Overdrive. Espero que ahorre un poco de combustible en carretera y haga velocidades crucero algo más altas... También localicé unos liberadores de rueda a muy buen precio, espero montarlos dentro de poco...
Actualmente me encuentro en esta fase...
Después de casi tres semanas de duro trabajo, pusimos la caja de cambios y el bulkhead, este último pintado en la parte externa con antigravillado, para resistir los posibles golpes de las piedras.
Al apretar las tuercas nos dimos cuenta que el escape que habíamos comprado a Inglaterra no encajaba en este modelo de santana, es decir, pegaba en un punto con el chasis.Parece ser que esta carrocería difiere de la inglesa. Vuelta a soltar escape, cortar y soldarle unos tubos para prolongarlo. Aquí está el resultado:
Pegando con el chasis
Corte y empalme...
Solucionado el problema
Aprovechamos también a cambiar una cruceta de transmisión delantera que tenía demasiada holgura. La del lado opuesto está esperando a ser cambiada también. El cambio de cruceta lo hicimos con un tornillo de banco y con los casquillos viejos de la cruceta vieja. La operación es sencilla pero costosa, y sobre todo hay que estar muy atento a los rodamientos de agujas que lleva, ya que se salen con facilidad.
Una vez acabado con las trasmisiones, empezamos con el embrague. Aprovechamos la ocasión para cambiar el cilindro principal, esclavo y latiguillo de embrague. Una vez montado, el purgado fue muy sencillo. Para el purgado es necesario un bote con un tubo del diámetro del purgador del cilindro esclavo. Tal y como pone en el manual, se vierte un poco de líquido de embrague en el bote y con la ayuda de otra persona se pisa y suelta el pedal a la vez que va saliendo líquido por el purgador previamente abierto. Cuando dejen de salir burbujas, se aprieta el purgador y listo. En esta foto se aprecia el sistema de embrague ya montado
Al montar la bomba de freno, vimos que por un racor no bombeaba por lo que al ser una bomba de doble circuito, dedujimos que la bomba estaba estropeada. Hubo que montar una bomba principal de freno nueva. Después purgamos el freno, exactamente de la misma forma que el embrague, solo que una vez por cada cilindro de rueda, empezando por el más cercano.
Carrocería
Una vez acabada la parte de la mecánica, comenzamos con la carrocería, concretamente por los bajos del coche. Primero se quitó el óxido de los nervios inferiores. Después se aplicó una imprimación bicomponente hempel y a lo que era hierro se aplicó directamente antigravillado. Al aluminio, se aplicó directamente la pintura de brea, para darle una mayor protección. Una vez hecho esto, se montó encima del coche.
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Una vez pintada y puesta en el coche
Una vez puesta en el coche, empezamos a picar las aletas traseras, sobre todo la izquierda. Le habían dado demasiada masilla en alguna reparación anterior y esta con los años se había agrietado, por lo que tocó estar picando casi dos días con mucho cuidado de no dañar la chapa. Una vez quitada toda la masilla en mal estado, se imprimaron las dos aletas y se enmasillaron. Esto último lo realizó Seve, un albañil ya jubilado y un gran amigo,que dejó las aletas perfectas. Fue impresionante verle con que destreza aplicaba la masilla. La aleta destrozada se convirtió en esto...
Una vez hecho esto, se lijó todo con lija P400-P500. Después se aparejaron todas las puertas y las aletas traseras. Este producto evita que la masilla absorba la pintura de acabado, evitando fallos.
Después de lijar se lijó todo el coche cambiando de lija gradualmente desde p400 hasta dejarlo todo prácticamente pulido, gracias a la lija P800. A la hora del lijado me ayudó mi tío Paco, y poco a poco lo dejamos listo para que mi tío Jose Ignacio, un profesional de la pintura, le diese por fin el color que había elegido, verde warwick original de Land Rover. Pero antes de eso, mi tía (Eva) mi madre (Ana) y mi abuela (Asun), dejaron el coche sin rastro de una mota de polvo.
A la hora del acabado, mi tío, costumbrado a pintar el interior de una clase V en dos minutos, con el compresor y la pistola que teníamos, tardó más de media tarde en pintar el Santana. Después de estar casi un mes preparándolo para verlo de verde, por fin llegó el gran día...
Para colmo, empezó a llover casi al final de la tarde y afectó principalmente a una aleta, la cual hubo que lijar y volver a pintar, pero el resultado para haberlo hecho en esas condiciones fue muy muy bueno. Aquí el coche ya de verde a plena luz del día.
Dos días después de haberlo pintado empezamos a atornillar, techo, puertas y aletas.
Ya con las puertas puestas... Teníamos un par de problemas, el primero era el marco de parabrisas que estaba totalmente podrido, por lo que tuve que pedir uno a jaen. El que compré de desguace le abrí un agujero en un lateral y le metí minio y lo agité, para pintarlo por dentro. El segundo problema,era que el tunel de palancas no me valía debido a que la caja que compré en un desguace no era exactamente como la que traía el coche, debido a las formas de las palancas. Por lo que tuve que doblar palancas y además reforzar con fibra de vidrio y hacer agujeros nuevos en el nuevo tunel.
